La seducción de un magnate de Merline Lovelace

Rory Burke estaba decidido a que Caroline Walters fuese su plato principal. Tras descubrir la verdad sobre su antigua amante, Rory había orquestado aquel encuentro en la soleada Costa Brava española el día de San Valentín.

Su plan era atraer a Caro de vuelta a su cama, pero esa vez como su esposa. Estaba convencido de que iba a salirse con la suya... hasta que la fuerza de la pasión le hizo perder la cabeza.

Novela corta, tan cortita que se pasa en un suspirín. Quizá por ello, aunque me ha gustado, casi no me dio tiempo a disfrutar y ya estaba en el happy end.

La seducción de un magnate es la historia de un reencuentro. El chico malo que iba camino de un trágico final es hoy en día un hombre con recursos. Un hombre que tiene el firme propósito de resarcir a aquellos a los que en su día pudo perjudicar. Entre ellos se encuentra Caroline Walters, la buena chica a la que robó su virginidad y a la que dejó atrás. Por aquel entonces él no era consciente del daño que eso le podía reportar y cuando años más tarde se entera, se hace el firme propósito de enmendar su error.

Rory Burke ya no tiene nada que ver con el chico que era en su pasado, pero Caroline tampoco. Sin embargo la atracción que les unió por un instante en el pasado, se reaviva al volverse a encontrar.

Conocer y superar el pasado y reconquistar a una mujer herida son los pilares donde se asienta esta novela. Editada especialmente para San Valentín, no han de faltar esos detalles románticos, que a mí no me llaman, pero que otras mujeres bien saben disfrutar.

Resumiendo: cuenta con los elementos que podemos esperar en una novela romántica y está entretenida, sin más.