lunes, 21 de septiembre de 2020

Magia dudosa, Laura Kinsale

Roderica tiene un don, pero para ella es un castigo divino: puede leer el pensamiento del resto de los mortales. Por eso no puede enamorarse, ni casarse, ni llevar una vida normal. Se regisna por tanto a vivir sin amor. Hasta que se topa con un hombre cuya mente no puede leer. Entonces ve un camino para la felicidad: casarse con el Conde Diablo, arruinado lord en cuya hacienda encontrará motivos para temer, de nuevo, el desgraciado don con que la naturaleza la ha premiado.

Faelan Savigar es un noble atractivo pero no tiene dinero. Los secretos de su alma son los que fascinan a Roderica. Surge el amor, pero es muy posible que él no sea más que in vil mentiroso o incluso un criminal. A pesar de todo lo que hay en contra, ella no es capaz de negarle su corazón e incluso su alma.

Pocas veces me dejo guiar por las portadas de las novelas, pero en esta ocasión me gustó la portada, su colorido y su sencillez. 

He leído alguna novela más de esta autora y no me defrauda su modo de narrar, sus descripciones, la personalidad de sus protagonistas, ni las situaciones en los que les mete.

La historia se desarrolla en Inglaterra y en Irlanda, a finales del siglo XVIII.

Roddy viene de una familia dedicada a la cría caballar. Su pasión son los caballos y las carreras de equinos y es muy buena en su trabajo. Lo curioso de ella es que escucha e interpreta los pensamientos de los animales y de las personas. Siempre mejor los primeros que los segundos.

Faelan es un conde irlandés sin un penique. Se encuentra con nuestra heroína, como no, en una carrera de caballos. Más curioso aún que haga caso de lo que ella le predice y que es que corre peligro y puede morir si corre. Escuchar sus locuras le va a costar mucho dinero, pero aún así hace caso a la advertencia.

Más curiosidades: la protagonista no puede leer la mente de Faelan. Me ha recordado a otra novela en que ella puede leer todos los pensamientos salvo los del chico.

En esta novela se siente el dolor de Roddy, su pena al darse cuenta de que muchas personas se alejan de ella como si fuera una apestada. No es de extrañar, de todos modos, porque alguien que puede leer lo que estás pensando da un poco de miedo. Por tanto, su don la hace ser una persona aislada incluso dentro de su propia familia. Todos están incómodos sabiendo que puede ver lo que piensan.

El hecho de que Roddy no sea capaz de ver lo que piensa Faelan, la ayuda a tener esperanzas de formar una familia como todo el mundo. Todos les auguran un mal matrimonio porque Faelan tiene una reputación infame, pero a pesar de eso ella se arriesga y pone todo su corazón en la relación. Incluso él mismo le advierte de la inconveniencia, de que no será un buen esposo, pero ante su decisión nada puede hacer porque, por si fuera poco, necesita imperiosamente la dote de Roddy.

Viajan a Irlanda, a la propiedad de Faelan que es una total ruina. Y las escenas graciosas se suceden cuando ella duda muchas veces de su marido. No está acostumbrada a tener que adivinar, a basarse en la intuición y eso la desborda. Por más que lo intenta, no consigue escuchar ni uno solo de los pensamientos de Faelan.

Lo que sí puede leer es el pensamiento de los campesinos que les ayudan a reconstruir la penosa propiedad de Irlanda. Eso la sume en el desconcierto total porque todos parecen convencidos de que su marido asesinó a su propio padre.

Me ha parecido una historia muy entretenida, con personajes llenos de dudas y sentimientos maravillosos. Muy romántica. Y sobre todo bastante imaginativa porque desde luego la historia no es corriente y está llena de magia.

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