Cuando Alessandra Lamont despierta en su casa y descubre que está en llamas, sabe que la amenaza del jefe de la mafia, Michael Tortta, se ha hecho realidad. Su exmarido, que acaba de ser asesinado, le debía un millón de dólares, y Trotta parece estar dispuesto a todo para recuperarlos. Pero en el último momento aparece Harry O’Dell, un agente del FBI que libra una guerra a muerte contra el crimen organizado, y le salva la vida. A partir de ese momento, Alessandra necesitará de su protección constante si quiere sobrevivir, pero pronto descubrirá que hay otros peligros con los que no había contado y que la acosan cada vez con más insistencia: la creciente atracción que siente por Harry, el miedo a sucumbir a una pasión que les arrastra a los dos a un mundo desconocido…
Harry parece decidido a que le maten, afronta las misiones más peligrosas asumiendo todos los riesgos. Es un agente atípico del FBI, desaliñado, malhablado y con una profunda amargura. Hace dos años un camión mató a su hijo mayor y a su mujer de la que estaba divorciado. Tiene otros dos hijos pequeños a los que no ha visto desde entonces porque no se atreve a encararlos, antes debe meter entre rejas a Michael Trotta, a quien culpa de aquellas muertes, es su obsesión y vive para vengarse.
Alessandra ha sido, durante su matrimonio, la típica mujer objeto. Guapísima y elegante. Harry sospecha inmediatamente de ella, una mujer tan perfecta tiene que ser tan frívola como su aspecto. Cuando explota la casa de Alessandra, él la salva del fuego, pero ella sólo quiere rescatar su ropa. Se llevará una sorpresa, ese mismo día el juez tiene que decidir si el dan en adopción a una niña con una grave enfermedad y la ropa era para estar presentable en el juzgado. Pronto Harry y Alessandra confían el uno en el otro y sienten una atracción mutua que no quieren reconocer.
Michael Trotta está dispuesto a matarla, va subiendo la recompensa a quien informe de su paradero y el FBI, sin su consentimiento, la usa como cebo para atrapar al mafioso. Todo sale mal. Harry, cuando se entera que su hermanastra, que se ocupa de sus hijos, quiere iniciar el papeleo para adoptarlos y quitarle la custodia se lleva a Alessandra con él para protegerla al pueblo donde tiene escondida a su familia.
Harry entonces se encuentra con sus hijos, pero éstos le rechazan y él no sabe afrontar ese rechazo, ni tiene el valor para luchar por ellos, sigue pensando que lo primero es la venganza.
Una preciosísima novela. Llena de ternura, sentimientos y acción, ésta no decae en ningún momento. Para mí la mejor con diferencia de Suzanne Brockmann. Harry no es el típico protagonista de esta autora. Es un hombre lleno de problemas, tierno y bueno, pero perdido. Tendrá que encontrarse con Alessandra, con su comprensión y optimismo para salir adelante y encaminar su vida.
No tiene desperdicio, como todas las novelas de Brockmann, los secundarios son de lujo. George, el compañero de Harry, enamorado de su jefa que también es su exmujer y su amante Kim. Shanon, el hijo de Harry, un niño de 14 años, bailarín, que aunque piensa que su padre quería más a su hermano mayor muerto y no está a la altura de éste, protege a su hermana pequeña y fuerza a su padre a luchar por ellos.
Otra buena novela de Titania descatalogada, pero no imposible de encontrar. La tengo desde hace años y de vez en cuando la releo. Vale la pena.
Harry parece decidido a que le maten, afronta las misiones más peligrosas asumiendo todos los riesgos. Es un agente atípico del FBI, desaliñado, malhablado y con una profunda amargura. Hace dos años un camión mató a su hijo mayor y a su mujer de la que estaba divorciado. Tiene otros dos hijos pequeños a los que no ha visto desde entonces porque no se atreve a encararlos, antes debe meter entre rejas a Michael Trotta, a quien culpa de aquellas muertes, es su obsesión y vive para vengarse.
Alessandra ha sido, durante su matrimonio, la típica mujer objeto. Guapísima y elegante. Harry sospecha inmediatamente de ella, una mujer tan perfecta tiene que ser tan frívola como su aspecto. Cuando explota la casa de Alessandra, él la salva del fuego, pero ella sólo quiere rescatar su ropa. Se llevará una sorpresa, ese mismo día el juez tiene que decidir si el dan en adopción a una niña con una grave enfermedad y la ropa era para estar presentable en el juzgado. Pronto Harry y Alessandra confían el uno en el otro y sienten una atracción mutua que no quieren reconocer.
Michael Trotta está dispuesto a matarla, va subiendo la recompensa a quien informe de su paradero y el FBI, sin su consentimiento, la usa como cebo para atrapar al mafioso. Todo sale mal. Harry, cuando se entera que su hermanastra, que se ocupa de sus hijos, quiere iniciar el papeleo para adoptarlos y quitarle la custodia se lleva a Alessandra con él para protegerla al pueblo donde tiene escondida a su familia.
Harry entonces se encuentra con sus hijos, pero éstos le rechazan y él no sabe afrontar ese rechazo, ni tiene el valor para luchar por ellos, sigue pensando que lo primero es la venganza.
Una preciosísima novela. Llena de ternura, sentimientos y acción, ésta no decae en ningún momento. Para mí la mejor con diferencia de Suzanne Brockmann. Harry no es el típico protagonista de esta autora. Es un hombre lleno de problemas, tierno y bueno, pero perdido. Tendrá que encontrarse con Alessandra, con su comprensión y optimismo para salir adelante y encaminar su vida.
No tiene desperdicio, como todas las novelas de Brockmann, los secundarios son de lujo. George, el compañero de Harry, enamorado de su jefa que también es su exmujer y su amante Kim. Shanon, el hijo de Harry, un niño de 14 años, bailarín, que aunque piensa que su padre quería más a su hermano mayor muerto y no está a la altura de éste, protege a su hermana pequeña y fuerza a su padre a luchar por ellos.
Otra buena novela de Titania descatalogada, pero no imposible de encontrar. La tengo desde hace años y de vez en cuando la releo. Vale la pena.
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