Tapestry de Karen Ranney

Dixon Alexander Weston, conde de Cardiff, es un hombre atormentado, un hombre que ha regresado de la guerra desfigurado, con el rostro gravemente destrozado, para heredar el título que tras la muerte de su padre y hermano le corresponde. Nunca esperó adquirir tal rango, su futuro estaba en la armada, pero las heridas sufridas y la muerte de sus familiares no le dejan otra alternativa. Desde ese momento sabe que es su obligación y su deber respetar su título y ocupar el lugar que legítimamente le corresponde.

Durante la guerra resultó horriblemente herido, tanto que para ocultar las cicatrices y quemaduras lleva una máscara de cuero negro que le cubre todo el rostro, un guante que oculta su mano quemada y viste siempre de riguroso negro, pues negra es su alma y su esperanza. Lleva un año recluído en sus propiedades, aislado de todo y todos.

Su aspecto es tan tenebroso que todos le temen y rehuyen, sus criados le evitan y viven atemorizados de encontrarse con él por los pasillos, si no fuera por los elevadísimos sueldos que les paga, no trabajarían para él. Pasa la mayor parte del tiempo oculto en una de las torres de la fortaleza familiar, encerrado en su dolor y sufrimiento y odiando su arruinado rostro y maltrecho cuerpo. Tan grande es su desespero que tiene siempre un arma sobre el escritorio y sabe que cuando ya no pueda resistir más, acabará con su vida.

Laura Blake ha estado enamorado de Alex desde que era una niña, pero cuando él se marchó a la guerra, cuatro años atrás, ella seguía siendo una niña y él era ya, lógicamente, un adulto por tanto nunca la vio como tal. Pero ahora es ya una mujer y espera que por fin él repare en ella y la vea como lo que es, una mujer que siempre le ha querido. Laura sabe de su regreso y sabe por las habladurías que ha vuelto muy malherido, sabe que la gente le rehuye y teme, pero a ella no le importa. Después de un año escribiendole e intentando verle y ante la negativa de éste a recibirla decide tomar medidas drásticas, quiera Alex o no va a verla. Así que, se presenta a su puerta vestida como una humilde campesina en búsqueda de trabajo. Alex no la reconoce y la contrata.

Laura con un nombre falso comienza a trabajar como sirvienta para Alex y aprovechando este hecho estar cerca de él, intenta que él repare en ella. Alex está desconcertado con la nueva sirvienta que no rehuye su mirada, que no se aparta de él, que no le evita hasta el punto que cuando él la toca no se encoge de miedo o repulsión, que hasta llega el punto de enfrentarle y discutir con él sobre la administración de sus tierras!!!.Alex llega a pensar que la pobre no está bien de la cabeza, es la única explicación.

Pero aún así y pese a ello se siente cada vez más atraído por esta hermosa joven, que le hace recordar que pese a su aspecto sigue siendo un hombre. Y ella implacablemente le busca, le enfrenta y discute con él, después de todo cómo puede no reconocerla, se lamenta ella. Ella le reconocería a él en cualquier lugar tras esa máscara y esas cicatrices, para Laura él sigue siendo su Alex al que ha adorado desde niña, el que sabe es y será el único hombre para ella. Por eso quiera curar su corazón y darle una oportunidad junta a ella.

Poco a poco Laura va llegando a Alex a su corazón escondido tras su coraza, a ayudarle a curar sus heridas, sobre todo las del alma, pero esto no supone conseguir tan fácilmente la felicidad, después de todo siempre puede perderse todo. Alex es requerido para ayudar a su país, su deber, su honor se debaten con su amor por Laura, pero él confía en ella y sabe ella le comprenderá. Esto supone la separación de la pareja y implicará muchísimos malentendidos, dolor, sufrimiento y desperación... que pondrá a prueba la firmeza de los lazos que los unen y cómo superar el dolor que trae consigo.

Es una novela preciosa con la que he reído, he llorado y sobre todo me he emocionado y conmovido mucho. Se refleja tal devoción y entrega, tanta confianza que es imposible no sufrir con los personajes no compartir sus sentimientos, su dolor y soledad.

Laura y Alex son una pareja que se complementan muy bien, el carácter alegre y extrovertido de ella ilumina el sombrío y tenebroso de él, la actividad y dinamismo de ella despiertan el letargo en el que se hunde Alex. No obstante el libro se divide de hecho en dos partes, que marcan trágica y determinantemente la historia y el carácter de los personajes. La historia de amor es muy dulce pero a la vez es muy triste, se entremezclan las risas con las lágrimas, la alegría con la tristeza, la esperanza con la desilusión...

No puedo explicar más sin desvelar detalles importantes de la novela, sólo os digo que además de narrarnos una historia de amor, también nos refleja una parte importante y dolorosa de la vida. Los protagonistas pasan por muchas situaciones que hirieren gravemente sus sentimientos y marcan cómo se enfrentan a la vida, pero es precioso leer como cada uno intenta curar las heridas del otro, como cada uno se enfrenta a sus más terribles miedos por llegar al corazón del otro.

Este libro se ha convertido en uno de mis preferidos, es un libro que ha calado muy hondo en mi por todos los sentimientos y sensaciones que despierta, por la narración, la historia y sobre todo por los personajes protagonistas de esta novela, por la evolución y el cambio que vives con ellos, por la dulzura y la tristeza de su historia de amor. Insisto en que con este libro vas a reír pero también vas a llorar, de todos modos, por leer una historia tan bonita creo que vale la pena.

Es difícil no emocionarse con diálogos como estos, con escenas tan dulces, con los miedos de ambos protagonistas y no emocionarse con un final tan tierno y tan romántico...

El libro tiene aspectos que rompen algunos tópicos, empezando por el protagonista. Alex es realmente un hombre desfigurado, no tiene cicatrices que realzan su atractivo y le confieren un aire de guerrero, no, es un hombre que al mirarse en el espejo ve su rostro destrozado, perdiendo su aspecto de dios griego y viendo en los ojos de los demás el horror y la repulsión.

Durante la primera parte del libro Laura le ayuda a sanar a aceptar su nueva vida, y es una parte muy dulce... no obstante en la segunda parte se ciernen cambios y giros drásticos en la historia donde el personaje que cambia es Laura, donde es ella la que debe sanar y cuando se ve que el nexo entre ellos los hace más fuertes pero a la vez también más débiles...Con todo, es un libro intenso, maravilloso que refleja aspectos duros de la vida pero también una historia de amor preciosa.