SINOPSIS
Se ha cometido un asesinato en los terrenos del Castillo de Valfeuillu, propiedad del conde de Trémorel. Dos cazadores furtivos han encontrado el cadáver de su esposa Berthe sumergido en un cañaveral. Mientras la
policía local de Orcival está convencida de haber encontrado a los culpables y da por concluida su línea de investigación, llega un policía especial de la Sûreté de París, el inspector Lecoq, que se hace cargo del caso.
El astuto detective inicia su propia investigación —caracterizada por el constante uso del método deductivo— recolectando pruebas, estudiando exhaustivamente
el escenario y las posibles circunstancias del crimen, entrevistando a los testigos y analizando los posibles móviles de los sospechosos
Opinión:
Otra extraordinaria novela editada por D'Epoca. Cuidada encuadernación, preciosa portada y maravillosa en su interior por el contenido y por la sutileza y elegancia de sus páginas.
El argumento se basa en un crimen y en las pesquisas del hombre que lo investiga. Estamos hablando de otra novela de género policíaco y de las buenas. El cadáver es el de una condesa, una mujer a la que mucha gente admira por su buen hacer, y que aparece en extrañas circunstancias.
A raíz del descubrimiento del cuerpo, entran en escena varios personajes que van dando forma a la narración, que se complica más porque el marido de la condesa no aparece por ninguna parte.
Aunque el protagonista indiscutible es Lecoq.
Lecoq es un hombre extraordinario, con una capacidad deductiva asombrosa. No da una pista por perdida, no se cree nada de lo que ve a primera vista, saca sus propias conclusiones a base de hablar con unos y otros. No es el clásico investigador, su método de trabajo me ha dejado perpleja.
También me ha dejado asombrada el modo en que el autor, sin duda de los mejores, va adentrándonos en un mundo que parecía perfecto pero que no lo es. Los condes no son lo que parecían, su vida no era la que todos imaginaban y vamos descubriendo poco a poco sus cuitas, sus secretos y sus auténticas personalidades. En esta novela tampoco el oro todo lo que reluce.
He llegado a sospechar de cada uno de los personajes, salvo de Lecoq.
Se trata, además de una trama policíaca, de una novela que nos deja conocer la auténtica verdad sobre los implicados, metiendo al lector poco a poco en un entramado estupendamente ideado, y haciendo que participes de él, con una solapada, o poco solapada si se quiere, crítica de los dimes y diretes de una sociedad que no es lo que aparenta.
Es una maravilla leer las descripciones, meterse en la época y casi sentir que estamos en uno de esos salones de la alta sociedad.
Si eres amante de las novelas de este género, que no te eche para atrás el precio porque, además del argumento, la estupenda narrativa y el depurado estilo del autor, el libro merece la pena. Es de los que se guardan como un tesoro y se enseñan a los amigos... pero no se prestan por si acaso ;).
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