Sedúceme, de Mary Balogh

Segundo libro de la serie «Quinteto de los Huxtable ».

JASPER FINLEY, barón de Montford, es un seductor que decide probar el «más difícil todavía» y apuesta que en dos semanas seducirá hasta las últimas consecuencias a una dama virtuosa. Sin embargo, la presa escogida, la ingenua y hermosa Katherine Huxtable, resulta ser indomable e inflige a Jasper una derrota humillante. Pero parece que el barón no escarmienta, porque cuando vuelven a encontrarse años después, propone a Katherine una nueva y arriesgada apuesta en la que están en juego nada menos que sus propios corazones.

Como casi siempre, parece imposible leer las sagas por orden tal como las han escrito las autoras. Éste es uno de los casos. Pero bueno, los personajes son independientes y tampoco me ha importado demasiado.

A primera vista no parece que el argumento de esta novela sea nada nuevo: típico libertino que se salta todas las normas a la torera, que conquista por conquistar y que se ríe del mundo. El colmo de su arrogancia, de la arrogancia de Jasper barón de Montford, es apostar a que en el corto espacio de quince días conseguirá seducir y encandila a una dama virtuosa. Orgulloso y cínico a más no poder el muchacho. Claro que se encuentra con la horma de su zapato como podéis imaginar. 

A primera vista también, este protagonista masculino me resultó incómodo. Demasiado altanero, demasiado orgulloso, demasiado irónico… Demasiado de todo, en una palabra. Para mí era el anti-héroe de novela. Y no es que no me gusten los libertinos, ni muchos menos, me encantan porque resultan tan sensibles al final que hasta te ríes del modo en que acaban cayendo en las redes del amor. Pero Jasper se me atragantaba.

Alto ahí, he dicho que se me atragantaba, no que se me haya atragantado. Al final he terminado queriéndole.

Ahí es donde reside la buena narrativa que caracteriza a una autora, cuando consigue que casi odiemos a uno de sus personajes para luego darle la vuelta y mostrarlo encantador, tanto que acabas sucumbiendo a su personalidad.

Le vemos intentando ganar la apuesta, seducir a la dama aunque para eso tenga que saltarse todas las reglas de la caballerosidad. Tiene que ganar como sea. La ha hecho en un momento estúpido, cuando estaba borracho como una cuba, sin pensar, pero una vez hecha no puede perder ante sus amigos o quedaría como un idiota.

Tampoco ella me parecía fascinante al iniciar la novela. Y también me he confundido. Lo que son las cosas.

Kat es la hermana del conde de Merton, una muchacha aparentemente inocente y de lo mejorcito de la sociedad. Por eso Jasper apuesta a que va a conquistarla. Ella es una presa fácil porque está convencida de ser incapaz de enamorar a un hombre atractivo y la llegada de Jasper a a su vida supone un aire fresco. Perola autora nos sorprende con una escena estupenda donde la heroína muestra su verdadero coraje. Aquí empezó a gustarme de verdad.

El destino les separa y vuelven a encontrarse al cabo de tres años. Es entonces cuando Jasper realiza una nueva apuesta: conseguir que Catherine se enamore perdidamente de él.

Me he divertido con esta novela. Tiene conversaciones chispeantes, situaciones casi cómicas, los enfrentamientos entre los protagonistas agradan.

Los secundarios también me han parecido divertidos.

Resumiendo, que me parece una novela muy entretenida y bien contada.

Linnea

Romántica

Compra esta novela aquí