No digo nada nuevo si afirmo que Nuria Rivera crea historias preciosas. Pero creo que en esta se ha superado porque, aparte de un romance estupendo nos regala un entorno maravilloso en la Barcelona de 1888, dejándonos ver, casi como si hubiésemos podido estar allí, los distintos eventos que se crearon para la Exposición Universal.
Me ha gustado la decisión de Inés, una mujer que, aunque adelantada a su tiempo, criada por un padre que la anima a ser independiente y sentirse con las mismas responsabilidades de un varón, debe luchar contra la arcaica sociedad donde los hombres eran los que mandaban. La cantidad de dificultades a las que tiene que enfrentarse (la muerte de su padre, el control de la fábrica, su propio negocio, la locura de su madre y el desgraciado que intenta cortarle las alas), solo pueden ser soportadas por el amor que siente por Gonzalo… aunque también él le falla en un momento dado. Es de esas heroínas a las que admiras nada más conocerla.
Me ha encantado Gonzalo, porque se enfrenta a su padre con tal de estudiar lo que le gusta: psiquiatría, una rama de la medicina que no estaba del todo aceptada en esa época. Su amor por Inés es tan profundo que, cuando se cree traicionado, no reacciona como es debido.
La documentación es de las de quitarse el sombrero, el romance de suspirar y las aportaciones que hace Nuria Rivera sobre la vida en 1888 y los tratamientos médicos de la época me han tenido atrapada de principio a fin.
Es esta una de esas novelas que acabas con una sonrisa y el corazón henchido de agradecimiento a la autora.
100% recomendable.
Nieves
Compra esta novela aquí
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.