Ella necesitaba tener un hijo…Lea de Montreau tenía una elección difícil: casarse, tener un heredero o renunciar a su castillo. Era una mujer orgullosa y estaba dispuesta a hacer lo que fuera preciso por proteger a su gente. Y pareció que el destino se mostraba favorable con ella cuando la reina le envió a un hombre…
El guerrero Jared de Warehaven había estado prometido con Lea hacía mucho tiempo. Y ahora que el futuro de ella estaba en peligro era su momento de tomarse la revancha por su antigua traición. Los dos se necesitaban para sus planes, pero ninguno quería comprometer su corazón…
Opinión:
Esta es la historia de un reencuentro con la consiguiente carga de malquerencia y atracción entre los implicados. Jared de Warehaven tiene sobrados motivos para sentir animadversión por Lea, al fin y al cabo, ella fue la que rompió el compromiso y más tarde decidió casarse con otro.
En aquellos días, la disputa por el poder entre la reina Matilde y el rey Esteban se había cobrado por error la vida del hermano de Lea. La familia se sumió en un profundo dolor, pero tan infortunado suceso había traído consigo algo bueno: el reconocimiento por ambas partes de la neutralidad Montreau en la contienda. Esa desgracia marcó el carácter de Lea y le hizo tomar decisiones precipitadas: rompió el compromiso con Jared - sobrino de Matilde- y se desposó después con un hombre, que bien sabía que carecía del temple necesario para guerrear. Sin embargo fallecidos sus padres y esposo, ambos combatientes vuelven de nuevo sus ojos codiciosos hacia su feudo. Matilde envía a su sobrino “para protegerla” y Esteban la amenaza con un nuevo matrimonio, salvo que resulte estar embarazada de su recién fallecido esposo.
Jared de Warehaven siempre pensó que su condición de hijo de un bastardo -aunque fuera un bastardo regio-, fue el motivo por el que Lea rompió su palabra. Lleno de rencor vuelve a Montreau, siguiendo las órdenes de su majestuosa tía, y con la latente necesidad de ajustar cuentas con la mujer que un día amó.
Y hasta ahí puedo leer…
Esta obra es una historia de segundas oportunidades enmarcada en un tiempo político turbulento. Encontraremos a ese guerrero de ley y a esa dama de genio y figura. Seremos testigos de sus enfrentamientos, pero también de su pasional rendición. La autora nos irá desvelando, poco a poco, el pasado de sus protagonistas y las razones que impidieron en el pasado su unión. ¡Ah! y la figura del malo de turno correrá a cargo del ambicioso hermano del finado, y a su compinche, en el papel de pretendiente a la mano de la dama por parte del rey Esteban.
En definitiva es una novela corta para disfrutar de un paseo por el Medievo de la mano de unos personajes siempre tan apetecibles. Y aunque no sea una novela intensa es lo suficientemente entretenida, como para que su lectura merezca la pena. Me gusta mucho esa ambientación, y dado que no son tantas las novelas que nos presentan medievales, yo me doy por satisfecha con El hombre de sus sueños de Denise Lynn
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