Cuando la pasión espera - Ruth M. Lerga

Judith siempre estuvo enamorada de James, pese a lo cual se casó con otro hombre. Seis años más tarde, regresa a casa convertida en viuda. La insistencia de su padre la anima a ir a Londres para hacerse ver de nuevo en los salones de baile y las veladas en Vauxhall, aunque ella no quiere ni oír hablar de volver a contraer matrimonio. James no puede creer que la belleza a la que encuentra en casa de su madre una tarde sea la hermana menor de su mejor amigo, aquella muchacha a la que nunca prestaba atención. Pero lo es, y sin duda está interesada en él...

Desde luego, razón llevaba quien dijo que el orden de factores no altera el producto.

¡Ay, mis tres mosqueteros!

Si me enamoró Richard y me fascinó Julián, lo de James ha sido caer rendida a sus pies y pedirle porfa, porfa, porfa que me dedique una mirada o una sonrisa. O lo que él quiera. Una sola, no pido demasiado.

A pesar de ser una novela de Regencia, y estar ya acostumbradas a leer sobre bailes y normas sociales de la Inglaterra de esos tiempos, me ha sorprendido esta historia. No solo he vuelto a sentirme en esa época, es que me he metido de cabeza en ella gracias a las notas aclaratorias y a los guiños que va haciendo. Si una novela no consigue transportarme, puede gustarme pero no me va a enamorar nunca. Con Ruth, me voy de viaje siempre, es como tener un billete perpetuo de avión, y de primera clase. Y me enamoro.

Podría decir que los diálogos son estupendos (que es verdad), que las escenas románticas me han vuelto loca (son para babear), que mezclar en la novela a Richard y Nicole, los protagonistas de Cuando el corazón perdona, es un completo acierto (total, total). Podría, incluso, ponerme a analizar el estilo y todas esas cosas. Pues no. Porque el modo de escribir de Ruth M. Lerga es especial, es único.

No me extraña que diga que se sienta a charlar con los protagonistas para que le cuenten su historia. Se nota que lo hace. De otro modo no es posible crear unas escenas tan divinamente llevadas, unas discusiones tan divertidas, a veces a tres bandas, en las que intervienes sin darte cuenta poniéndote a favor de uno u otro (conste que yo siempre he estado al lado de James, más que nada por si el chico quiere regalarme esa miradita en agradecimiento).

Gracias por la Nota de Autora, en tus novelas la espero con ansia porque es tan estupenda como la historia que nos cuentas.

Gracias por haber hecho que vuelva a enamorarme de la Regencia asida a tu mano.

Si os gusta una buena novela de amor, no podéis dejar pasar Cuando la pasión espera. La pasión puede esperar; vosotras, no.