Diario de Kat, de María José Tirado

Diario de Kat es una novela que la autora empezó a publicarla en su blog, y yo leí gracias al aviso de El Rincón. Me alegro que la haya terminado y publicado porque es una historia muy bonita y de la que tenía ganas de saber la decisión que tomaba Kat.

Kat, como la llaman todos, o Kaythlin Swarzschild Fernández, es una joven que trabaja en un supermercado y que vive con Jaime, un estudiante universitario que cada fin de semana tiene una nueva cita. Kat debe empezar a escribir un diario por orden judicial. Sí, parece muy rocambolesco, pero la autora lo ha justificado tan bien que es simplemente un dato más, claro que a quién se le ocurre pillar a tu novio con otra, grabarlo con el móvil y subirlo a una red social....claro, eso solo se le podía ocurrir a Kat.

La vida de Kat es algo caótica. En el supermercado tienen que aguantar a un jefe con la mano larga, la relación con su madre no es ni de lejos perfecta, es más, a ella la ha criado su abuela, su abu, y a la que se le coge enseguida cariño. Kat es el fruto de una noche loca de su madre cuando era muy joven, y de cuyo padre lo desconoce todo. Imagina que de él tuvo que heredar su pelo rubio y sus ojos azules. Su madre nunca le ha querido hablar con él, pero Kat se está cansando ya de esa situación. Lo mejor en la vida de Kat son sus tres hermanos, trillizos además.

Aunque lo que de verdad alegra a Kat es ir al gimnasio. No porque sea una apasionada del deporte, si no por disfrutar las vistas de un hombre cañón que levanta pesas como si fueran almohadas. Lo que Kat no esperaba es que el destino la llevara a conocer a ese especimen de hombre. Claro que caerse encima de él no es la presentación ideal.

No voy a contar mucho más de la novela porque de verdad que es mejor que la leáis. El principio es muy divertido, me he reído con varias escenas y comentarios de Kat. Luego la novela se vuelve algo más seria, pierde ese toque de humor que es una pena, pero como el resto es entretenido y está muy bien escrito, no lo comento como algo negativo.

Enzo es un italiano que hace suspirar tanto a Kat como al lector, es casi el hombre perfecto, y digo casi porque al fin y al cabo es un hombre y su mayor defecto es Paola. Los primeros encuentros entre Enzo y Kat son estupendos, con tensión, algún que otro un momento embarazoso y más de una carcajada. La tensión se palpa en el ambiente y la química surge desde el primer momento. La autora es estupenda creando unos personajes que se atraen como polos opuestos. El resto de personajes también están muy bien descritos. Una mención especial se merece Antonia, la abuela, que es casi una madre y cuya energía envidiaría cualquiera. Otro personaje que llama la atención es la madre de Kat.

Una novela que empieza con muchas risas pero que se convierte en una bonita historia de amor, con escenas bastante subiditas, algo normal de la autora, y un final con alguna que otra sorpresilla. No he tardado ni un día en leerla, fue empezar y no poder dejarla.