Suculento peligro, de Mina Vera

Dana es una prestigiosa chef que acepta acompañar a su mejor amiga, María, a una discoteca ya que va a conocer al hombre que la ha enamorado a través de internet. Lo que parecía una cita sin importancia se convierte en una pesadilla cuando un hombre se sienta frente a Dana y le da órdenes de no moverse. Cuando la cita de María va al baño, todo sucede muy rápido.

María ha estado a punto de ser víctima de una trata de blancas. Al día siguiente y aún con el susto en el cuerpo, Dana acompaña a su amiga a la comisaría para hacer su declaración. Allí, decide agradecerle personalmente al inspector Ribera su papel fundamental en el caso. Ángel Ribera, lleva varios años tras los Tocqueville, casi se había olvidado de Dana cuando ésta acompañó a María a la comisaría. Claro que una invitación a Suculento, uno de los restaurantes de moda en la ciudad, donde Dana es chef, es difícil de rechazar.

Una cena, a la que se le suma una charla muy agradable, llevará a otra y así, poco a poco ambos se irán conociendo y aumentando esa tensión que está presente desde su primer encuentro.

Dana es un personaje decidido, que se ha labrado una reputación con esfuerzo y tesón, es leal y directa. Ángel es un inspector obsesionado con este caso, hace tiempo causó una profunda brecha en su equipo que aún están intentando superar. Pero Ángel tiene otra faceta, esa que muestra con su familia; es paciente y cariñoso con sus sobrinas, divertido y algo juguetón con los demás. Sabe lo que quiere y está dispuesto a arriesgarse y a luchar por ello.

Además esta novela cuenta con un elenco de personajes que llena de matices esta novela. Está Asensio, aún más obsesionado que Ángel con los Tocqueville, investigador y policía incansable, Suárez, la integrante más joven del equipo, el comisario Andrade, María, la fiel amiga de Dana y que está tratando de superar su calvario personal, además de otros personajes que deberéis descubrir.

Menuda sorpresa me he llevado con esta novela. Me ha tenido pegada a sus páginas desde el principio, no podía dejar de leer. La trama, cuyo argumento central se basa en un tema tan horroroso y real como es la trata de blancas, está tratado de forma cuidadosa y sin recrearse demasiado, pero con las suficientes pinceladas para que te ponga la piel de gallina. La tensión entre Ángel y Dana es palpable, su historia es pasional pero también me ha gustado los diálogos y esos momentos de intimidad de la pareja, no las escenas de cama, si no esas en las que vemos cómo se van conociendo, acercando y descubriendo; la visita al restaurante de Joan, la salida al teatro, ese paseo bajo la lluvia... escenas como esas son las que consigue que el lector sea crea la historia de amor, que la sienta y la vea crecer. La única pega que puedo encontrar a esta novela es que la declaración del protagonista no me pega nada con el personaje la verdad.

Aunque te imaginas quién puede ser alguno de los malos, la autora da más de un giro de tuerca estupendo que te deja con la boca abierta y deseando seguir leyendo.