En Florida, el investigador privado y ex-policía Ric Alvarado se infiltra en la organización del conocido jefe criminal Gordon Burns, junto con su ayudante y amiga de la infancia Annie Dougan.
El agente del FBI Jules Cassidy lleva mucho tiempo tratando de demostrar que Gordon ha iniciado contactos con redes terroristas islámicas; ahora, gracias a Nic y Annie ha encontrado un modo de entrar en la guarida del león. Pero en el curso de su investigación se encuentra cara a cara con Robin Chadwick, el carismático actor que no ha salido todavía del “armario”, y por el cual siente una poderosa atracción desde que se conocieran años atrás cuando Jules trabajaba en el caso del acosador de la hermana de Robin, una productora cinematográfica (Tess, protagonista de Hot Target ).
Robin está en la ciudad promocionando su próxima película y Gordon, que además de mafioso es un productor de cine aficionado,ofrece una fiesta en su mansión para presentar dicha película ; tiene un hijo sociópata que posiblemente ya haya asesinado a una agente infiltrada del FBI que trabajaba en su casa como ama de llaves.
A medida que la tensión sexual entre Ric y Annie por un lado, y Jules y Robin por el otro, aumenta a niveles peligrosos, también lo hacen los riesgos que están dispuestos a correr, llevados por su sentido del deber, de la lealtad y de unos sentimientos tan profundos que no se atreven a nombrar…
Tenía una ganas inmensas de leer esta novela y, por pitos o por flautas, nunca empezaba con ella. Por fin he conseguido hacer un hueco para leerlo de un tirón y estoy en una nube.
Esta autora me gusta muchísimo. Desde que leí El guardaespaldas quedé prendada de su forma de contar historias y traté de hacerme con todas sus novelas. Sus SEAL me tienen enamorada, pero el que desde el principio captó toda mi atención fue el agente del FBI Jules Cassidy. Estaba loca por leer su historia y no me ha defraudado para nada, todo lo contrario, es que me ha dejado con una feliz sonrisa en los labios.
No voy a extenderme, pero no quiero dejar sin decir que las dos historias de amor que hay en esta novela son estupendas. La autora ha sabido crear magistralmente cada una de ellas, entrando en detalles con la heterosexual (es una novela romántica para heterosexuales) y narrando con una delicadeza exquisita, dulce, natural y maravillosa la de Robin y Jules.
La trama es trepidante y adictiva. Os juro que lo he pasado de perlas leyendo esta novela.
Suzanne Brockmann me encanta, y es que además, caramba, esta autora me cae genial por todo cuanto se implica siempre en los temas sociales. A ver quien es el guapo que me viene a decir a mí que en la literatura románica sólo se leen ñoñerías.
Si no la habéis leído, no dejéis de hacerlo porque os estáis perdiendo una muy buena historia.
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