Sinopsis:
Bella y valiente, lady Eleanor, única heredera de sus tierras ancestrales, elige casarse con un maduro noble francés en lugar de con el brutal caballero elegido por el rey Eduardo I. Se habría casado gustosamente con el mismísimo diablo para preservar Clarin y derrotar a los escoceses rebeldes que mataron a su padre. Pero cuando Brendan Graham, fiero proscrito de las Highland, la toma como rehén, inspira en ella los más profundos deseos. Ahora, alejada de sus amadas tierras y sujeta a un matrimonio de conveniencia, se encuentra rodeada por la traición y acusada de asesinato. Y solo un hombre puede salvarla de la tortura y la muerte que le aguardan. El hombre sigue siendo su mayor enemigo... aunque tenga su corazón y su vida entera en sus manos.
No voy a negar que las historias de ingleses y escoceses me llaman poderosamente la atención. Por eso no dudé un momento en aceptar leer esta novela cuando me la prestaron. El argumento me gustaba y me puse a ello con ganas.
Eleanor de Clarín es la heredera de unas tierras que han pertenecido a su familia y debe defenderlas por encima de todo. Por ello, es capaz de casarse con cualquiera que pueda ayudarla a mantener su herencia. En la época en que se centra esta novela, ya sabemos que una mujer no tenía otro remedio que buscarse un brazo fuerte o poderoso si quería seguir teniendo lo que era suyo, aunque en realidad siempre acababa pasando a su marido. Pero no cabe duda de que ese tipo de heroína atrae a las lectoras de romántica. El caso es que Eleanor toma la decisión que cree más acertada y elige a un hombre que piensa puede resultar mejor esposo que los que le han propuesto.
Brendan Graham es el típico héroe de novela, que se hace atractivo al conocerlo, que es valiente y arriesgado y que tiene el coraje suficiente para vencer al que se ponga en contra de la mujer que ama. Aunque ella sea una especie de leyenda.
Hay muchas escenas románticas, pero también mucha enemistad entre los protagonistas.
La intriga de la novela, además de imaginar cómo quedan al final los protagonistas, es saber cómo se va a resolver el conflicto de Eleanor cuando es acusada de matar al anciano conde don el que decide casarse. Los que están interesados en quedarse con todo dicen que ella le ha envenenado y debe ser juzgada.
William Wallace da un toque de realidad a la novela, pero yo creo que la autora le da más importancia que a la de un simple personaje secundario al que ha introducido en la narración para hacerla más creíble y situarnos mejor en el tiempo. Casi, casi, casi, desbanca a Brendan en protagonismo y eso no me ha gustado demasiado.
Mailo
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.