Nuestra asignatura pendiente, de Brianna Callum

A quienes nos gustan los libros en papel solemos decir que “huelen”. Yo me he pasado cuatro días, que es lo que me ha durado esta novela de la editorial VR Europa, con la nariz metida entre sus páginas. Porque realmente, olía como a vainilla mezclada con canela, tal vez debido a unos pequeños trocitos de papel encontrados dentro. Y dado que la historia nos traslada a Marruecos, me ha parecido estar de nuevo allí.

La estupenda y cuidada encuadernación (¡su olor, por favor!) y una narrativa buena (se agradece leer algo bien escrito después de tener que cerrar otro libro lleno de erratas) que me ha encantado, junto a la trabajada documentación, han conseguido hacerme la lectura muy, pero que muy agradable. Y aprender cosas que no había visto o se me pasaron por alto. Ya solo por esto le pongo cinco estrellas.

Algo sobre el protagonista: Kyle cometió un error de juventud, perdió a su novia y se encontró a cargo de un bebé. A pesar de todo, es dichoso junto a su hija Bethany, una adolescente sensata a quien le encantan las novelas románticas de la autora Miranda Darcy, y le entusiasma su trabajo de antigüedades. El personaje es un hombre sin aristas, tal vez demasiado buena persona tal vez, que se arrepiente de aquella noche loca, pero nunca de haber sido padre, y sabe ponerse a la altura de una adolescente que tiene sus propios sueños y necesita repuesta al abandono de su madre. Kyle no ha podido olvidar a su amor de juventud, a la única mujer que ha querido y sigue queriendo a pesar de no haber vuelto a verla. Es atento, tierno y cree en la igualdad entre hombres y mujeres. Me ha caído bien; de vez en cuando agrada un protagonista que sea un hombre de la calle.

Emily ha pretendido olvidar al único hombre al que ha amado, sin conseguirlo. Ha creado una coraza a su alrededor, dedicado su vida a escribir novelas románticas (que Bethany devora) y conseguido el éxito. Pero le falta algo: conocer sus raíces, puesto que por sus venas corre sangre marroquí. El único modo de saber la historia de Malak, su abuela, es irse a Marruecos. Este personaje sí tiene alguna arista más que Kyle porque, a pesar del éxito y el disfrute de escribir novelas, no ha querido relacionarse en serio con ningún hombre desde que Kyle la engañó. Es más introvertida, más recelosa, pero una mujer a la que no le importa arriesgarse para defender a las mujeres.

El romance de esta novela es bonito, lleno de ternura; un amor de segundas oportunidades. Pero no ha sido la relación entre los personajes lo que más me ha llamado la atención y lo que me ha mantenido enganchada a la novela, sino la extensa documentación necesitada para escribirla.

“Nuestra asignatura pendiente” es un viaje a Marruecos en el que conoces ciudades, te paseas por los zocos, disfrutas de un estupendo té, aprendes tradiciones que ni te imaginabas… Incluso, saboreas las recetas de la abuela Malak que prepara la protagonista. Es una novela que habla de igualdad, del poder del hombre sobre la mujer en algunas sociedades, del acatamiento de algunas de ellas y de la lucha oculta de otras por cambiar las cosas. Es un libro en el que vas a ser invitada a una boda tradicional donde el color y la alegría lo inundan todo y estalla como fuegos artificiales. Donde vas a tener magníficas vistas del Rif, pasearás por Chefchaomen y participarás en una aventura en pleno desierto tras una tormenta de arena.

En esta novela se ven los colores, se huelen las especias, se te mete la arena en las zapatillas y te chupas los dedos con los dulces marroquíes. Y al final, tras el epílogo, te encuentras con unas cuantas recetas de la abuela de Emily para que probemos en casa. Yo, desde luego, pienso intentarlo.

Me ha gustado y la recomiendo.

Nieves